De rama en rama.

Quién se dique a la ilustración sabrá, lo difícil que resulta en ocasiones sobrellevar  la acumulación de las fechas de entrega de los trabajos. Los días pasan deprisa y se mueven sin avisar en el calendario. Para salir airoso, no queda más remedio que apretar los dientes, no levantar cabeza de la mesa de trabajo y, muy importante,  saber administrar los tiempos. Algunos trabajos tienen fecha de entrega concreta e inamovible, en otros, se difuminan en semanas y los pocos, ni se sabe. Así me veo saltando de encargo en encargo como un primate arborícola; que antes de soltar la mano de una rama, ya tiene en vista la rama que agarrará la otra mano… si no, malo.

En esta entrada os muestro algunos de los otros trabajos que tengo entre manos. Por un lado, la ampliación de especies de animales marinos de interés comercial para una guía de consumo responsable y, por otro, unos bocetos para una futura colección de pegatinas dirigidas gente menuda.

Espero que alguna de esas ramas sea la de salir a dibujar al campo, o mejor aún, una que sea la de pintar una acuarela de las que a mí me gustan.